El mercado de las criptomonedas ha experimentado una gran volatilidad recientemente, especialmente tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca en 2025. Aunque muchos analistas anticiparon un impulso significativo para las criptomonedas, la imprevisibilidad del presidente estadounidense ha generado incertidumbre en el sector.
A pesar de esto, Citi sostiene que 2025 podría convertirse en un año clave para la tecnología blockchain. Según el banco, este período podría ser recordado como el momento ChatGPT de la blockchain, similar al auge reciente de la inteligencia artificial. Las stablecoins jugarán un papel fundamental en esta evolución.
El Crecimiento de las Stablecoins
Las stablecoins, criptomonedas cuyo valor está vinculado a activos tradicionales como el dólar, se están consolidando como un puente entre el sistema financiero tradicional y el ecosistema digital. Su principal objetivo es ofrecer estabilidad de precios, evitando la volatilidad extrema que caracteriza a otras criptomonedas como Bitcoin o Ethereum.
En la actualidad, el mercado está dominado por USDT (Tether), con una capitalización de 145.000 millones de dólares, y USDC (Circle), que alcanza 60.000 millones. Citi proyecta que, en un escenario base, las stablecoins podrían crecer hasta alcanzar los 1,6 billones de dólares en 2030. En un escenario más optimista, el mercado podría expandirse hasta 3,7 billones, aunque riesgos regulatorios podrían limitar ese crecimiento a 500.000 millones en el peor de los casos.
El Impulso Regulatorio Bajo Trump
Citi destaca que la regulación en Estados Unidos será crucial para el crecimiento de las stablecoins. Trump planea firmar dos leyes antes de agosto —los proyectos STABLE y GENIUS— que establecerán un marco normativo para la emisión y el comercio de stablecoins respaldadas por el dólar. Una regulación clara permitiría una integración más profunda de estos tokens en el sistema financiero, ofreciendo pagos más rápidos, mayor transparencia y una liquidación más eficiente de activos.
El Dominio del Dólar y su Impacto en la Deuda Estadounidense
Citi prevé que aproximadamente el 90% de las stablecoins seguirán denominadas en dólares para 2030. Esto podría transformar a los emisores de stablecoins en grandes compradores de bonos del Tesoro de EE. UU., alcanzando una tenencia de hasta 1,2 billones de dólares en deuda pública hacia finales de la década, siempre que la regulación exija respaldos en activos líquidos y de bajo riesgo.
En Europa, las alertas están en aumento. El ministro de Economía de Italia, Giancarlo Giorgetti, advirtió que la política estadounidense sobre stablecoins representa un desafío mayor para Europa que los aranceles comerciales. Más peligroso que los aranceles es el avance de las stablecoins respaldadas por el dólar, afirmó en Milán, instando a la Unión Europea a reforzar la internacionalización del euro.
En respuesta, el Banco Central Europeo (BCE) avanza en el desarrollo de un euro digital para proteger la soberanía monetaria frente al avance de las monedas digitales privadas. A pesar de estas oportunidades, Citi advierte sobre los riesgos inherentes a las stablecoins, incluyendo la frecuente pérdida de paridad. En 2023, se registraron casi 1.900 pérdidas de paridad, de las cuales más de 600 incidentes involucraron a los principales tokens del mercado.
Las stablecoins están emergiendo como un componente crucial en el futuro del sistema financiero, pero su éxito dependerá en gran medida de un marco regulatorio claro que apoye su desarrollo y uso. Con el potencial de revolucionar las transacciones y el acceso a los servicios financieros, el tiempo dirá si 2025 se convertirá en el año que marque un antes y un después en el ámbito de la tecnología blockchain.
